El pasado miércoles Bellver Blue Tech Zone reunió a 112 asistentes para vivir una experiencia sensorial en la que el océano se convirtió en protagonista absoluto a través del arte digital inmersivo. La llegada de The Rhythm of the Ocean Vortex consolidó este espacio de Benicàssim como uno de los referentes nacionales en el circuito del arte digital contemporáneo.
La obra se presentó en Vortex, una sala 360º equipada con tecnología inmersiva de última generación que permite envolver al espectador en un entorno visual y sonoro total. Adaptada específicamente para este espacio, la experiencia ofreció un viaje profundo y sensitivo marcado por el ritmo hipnótico del océano.